Un levantamiento popular en desarrollo. Paremos la provincia hasta que caiga la reforma reaccionaria.
Una verdadera rebelión popular alcanza buena parte de los pueblos de Jujuy luego del paro general del viernes pasado que repudió la sanción, a altas horas de la noche, de la reforma reaccionaria de Morales y el PJ.
El recurso represivo ha fracasado, a pesar del despliegue y la saña con que actuaron las fuerzas policiales reiteradas veces en la jornada del sábado. Los cortes se vuelven a reconstituir una y otra vez y resultan más masivos. Las comunidades originarias están completamente movilizadas en todo el territorio provincial, y son protagonistas junto a los docentes, las organizaciones de la Unidad Piquetera y sectores de la Utep, de todas las medidas de lucha.
Fracasado el recurso represivo, el gobierno salió a prometer “diálogo” a las comunidades y a los docentes aunque en este último caso, siempre condicionado a que se levante el paro que fue ratificado por las asambleas el viernes pasado. Las comunidades contestaron que primero caiga la reforma (en algunos pliegos incorporan el reclamo de la renuncia de Morales) y los docentes, que se reabra la paritaria, ya que la oferta oficial deja al docente que recién se inicia 50 mil pesos por debajo de la canasta de pobreza, con un básico miserable y una mayoría de montos en negro que destruyen la carrera docente.
En el caso de La Quiaca, que ingresó en el cuarto día de cortes de ruta, se prevé el cierre de los mercados y comercios para el martes 20, día en que Morales pretende que se jure la nueva constitución. Allí suman sus reclamos también los cientos de compañeros que trabajan con “carros de mano” a los que se les impide trabajar en la frontera. Poco a poco, en torno de los cortes se va armando un pliego de reclamos de todos los trabajadores, todo encabezado por el reclamo que preside la lucha: “Abajo la reforma, arriba los salarios”.
En Ledesma se suman los trabajadores y delegados azucareros que vienen de haber realizado un masivo paro de 48 horas y retomarían las medidas esta semana.
Desde las 15:00 del lunes 19 los cortes se instalan en prácticamente todas las ciudades, incluido el acceso a la capital, cosa que se va a sostener todo el martes, en donde habrá una concentración masiva en el sitio donde se pretende hacer la jura. Para el martes 20 también se prevé la llegada de una numerosa delegación representantes de partidos, sindicatos y organizaciones populares entre ellos Gabriel Solano y Romina Del Plá dirigentes del Partido Obrero, además de Eduardo Belliboni del Polo Obrero.
¿Se quiebra el régimen de Morales?
Aún cuando el oficialismo viene de haber ganado con amplitud las elecciones, la intervención de los trabajadores está quebrando las premisas sobre la que se asienta el régimen que Morales supo armar a lo largo de más de siete años de gobierno y que pretende ser una carta de presentación de sus pretensiones presidenciales. Controló la calle, metió presa a Milagro Salas y coptó a la mayoría de sus punteros, instaló la idea de que un orden represivo, sumado a un conjunto de negocios e inversiones crearían trabajo y sacarían a la población de la pobreza. En los cortes y manifestaciones está la agenda de los trabajadores que desmiente por completo aquellos presupuestos. Jujuy tiene de los salarios estatales más bajos del país y los indicadores de pobreza son de los más altos. Del otro lado del mostrador están los resultados de la primera minera del litio Sales de Jujuy, que en un año recuperó la totalidad de su inversión de 500 millones de dólares, siendo que el yacimiento tiene una vida útil de 30 años o más.
Una constituyente herida ¿de muerte? por la movilización popular
El final abrupto del trámite de la constituyente acosada por la movilización popular es un símbolo de un régimen acosado, que supo en el pasado apelar a la movilización de los sectores medios e incluso de trabajadores en su apoyo. Hoy la calle es toda de las manifestaciones opositoras, cada vez más unitarias, que en algunos casos constituyen verdaderas puebladas.
Como afirmó uno de los constituyentes del PJ en la última sesión (que se aprestaba a votar a favor del engendro), aún cuando mañana pudiera jurarse la constitución, en el entendimiento popular esta será la constitución de la represión contra los trabajadores, ninguna otra cosa. Recordemos que Morales había tenido que renunciar a la idea de una constituyente que incluyera la posibilidad de la reelección, que pensaba realizar a fines de 2022, ahora se agrega que ha debido dar marcha atrás en pocas horas con un decreto que agravaba las sanciones contravencionales contra los manifestantes, en especial contra los empleados públicos. Además, tuvo que sacar del texto finalmente aprobado la eliminación de las elecciones de medio término y la norma que establecía que el que gana el gobierno accede a la mitad mas uno de la Legislatura.
Si el debate se hubiera extendido, el pueblo se habría enterado de que la reforma es, toda ella, un guante a medida de los intereses capitalistas; por ejemplo refuerza al extremo el derecho de propiedad y mandata a la Legislatura a sancionar una ley de desalojos express para familias asentadas o limita absolutamente la posibilidad de expropiar tierra en razón de utilidad pública.
Habilita “pactos con potencias extranjeras” con toda seguridad para habilitar un saqueo irrestricto de los recursos naturales (siempre por supuesto en nombre de que las provincias son las dueñas del recurso).
Elimina los fueros que protegen la libertad de los legisladores, un instituto que se creó para quien detenta el poder, no pueda meter presos a los opositores, que va a ser usado para perseguir a los legisladores de la izquierda.
Habilita a una Legislatura en la que tiene la mayoría agravada, a delegar facultades legislativas en el poder ejecutivo. Establece la “educación para el trabajo” como un principio general que va a justificar una degradación de la educación como formación integral de las personas y de acceso irrestricto y garantizado por el estado a todos los niveles educativos.
Las tierras fiscales estarán exclusivamente al servicio del negocio privado y de la producción en escala, desaparecen los planes de colonización de tierras y no hay política de tierras para garantizar el acceso a la vivienda. Las aguas de riego estarán en manos de un organismo autárquico, es decir autofinanciado que quedará bajo control de los grandes propietarios terratenientes.
La gesta de la docencia y del conjunto del pueblo de Jujuy ha obligado a la Ctera a llamar un paro nacional para el jueves 22, aún cuando su dirección acaba de firmar una paritaria por debajo de la oferta miserable de Morales. Todas las centrales obreras deberían llamar a paro nacional porque el triunfo de esta lucha será un golpe decisivo a los planes ajustadores y represivos que comparten todos los políticos capitalistas a nivel nacional.
Es claro que lo que une a la mayoría del pueblo en estas horas, es que esta constituyente reaccionaria debe caer y al mismo tiempo el gobierno debe dar paso a los reclamos más inmediatos.
Hay que darle a esta enorme gesta popular más organización aún y completar un programa con todas las demandas de los trabajadores.
Desarrollemos en cada pueblo comités de lucha y asambleas populares, impulsemos un encuentro de delegados de estas organizaciones y de los sindicatos en lucha.
Hay que parar todo Jujuy hasta que la reforma caiga.