EN VÍSPERAS DE UNA ELECCIÓN MARCADA POR EL ESPECTÁCULO DESCOMPUESTO DEL OFICIALISMO Y LA OPOSICIÓN 

El sábado y el domingo se llevarán adelante las elecciones municipales y regionales. Se eligen alcaldes, concejales, gobernadores y consejeros regionales a lo largo de todo Chile. La importancia de éstas elecciones, más allá del recambio del personal político en comunas y regiones, radica en que sus resultados constituyen la plataforma de la cual deberán partir las coaliciones para la elección presidencial del año que viene. De allí proviene la preocupación de los partidos del régimen pues la campaña estuvo dominada por la apatía generalizada del electorado y, en las últimas semanas, se abrió paso un ánimo popular más vinculado a la bronca a raíz de la sucesión de escándalos de corrupción, abusos de poder e impunidad. Oficialistas y opositores temen ser castigados en las urnas y, al menos, se espera un importante caudal de votos blancos y nulos como ya sucedió en las elecciones de consejeros del segundo proceso constituyente.

 

La podredumbre de quienes llaman a votarlos 

Si el caso convenios dejó al descubierto un esquema de defraudación de fondos públicos a través de fundaciones dirigidas por personeros políticos de primera fila del oficialismo, el caso Hermosilla viene a develar una red de intercambios de favores de todo tipo entre los 3 poderes del estado, el empresariado y el crimen organizado articulado por el abogado caído en desgracia que actuaba por cuenta y orden de Chadwick, personaje del corazón del Piñerismo. Pero los escándalos no terminan ahí: las maniobras para encubrir y lograr la impunidad del Padre del ex presidente de la UDI Javier Macaya -Eduardo Macaya- acusado de abusos reiterados a menores sólo encontraron un freno en la reacción de miles exigiendo justicia en las calles. Luego presenciamos lo de Cubillos cobrando un sueldo exorbitante como “docente” de la Universidad privada San Sebastián lo que deja al descubierto el armado de una caja política de la derecha financiada con fondos públicos y, como frutilla de una torta descompuesta y pestilente, el escándalo del subsecretario de seguridad Monsalve, acusado de violación por una funcionaria de su cartera que da cuenta de un operativo orquestado desde las altas esferas de poder para que el grave delito cometido contra una trabajadora subalterna quede impune. Las explicaciones de Boric sólo han servido para confirmar que desde La Moneda se le brindó tiempo y recursos del estado para contener la situación mientras que la víctima era hostigada, expuesta y las pruebas en contra del ex ahora ex secretario manipuladas. De fondo queda en claro que el feminismo del gobierno de Boric sólo se trató de una usurpación y malversación de la lucha de las mujeres y disidencias para sus fines políticos reaccionarios pues han puesto en peligro a una víctima para proteger a uno de sus filas.

Como se ve, sobran las razones para que teman un castigo del pueblo mediante el voto. El retorno al voto obligatorio como recurso para legitimar al sistema post rebelión del 2019 muestra sus límites insalvables frente a la magnitud de su descomposición.

 

A 5 años de la rebelión popular  

Han pasado 5 años del hito en la lucha popular más importante de las últimas décadas, donde la potencia del pueblo en las calles remeció los cimientos de la democracia pactada con los milicos. Y si bien pudieron desviar momentáneamente la bronca del pueblo trabajador expresada en las calles, lejos están de cerrar la crisis política que se abre con el monumental levantamiento del pueblo por los derechos sistemáticamente negados. Y el presente es prueba de ello. El reforzamiento del aparato represivo llevado a cabo durante el gobierno de Boric tampoco da garantías frente a un descontento popular que aumenta con la comprobación diaria de que las condiciones de vida para las mayorías populares han empeorado en éste periódo.

El revisionismo reaccionario de lo que significó el levantamiento popular del 2019 impulsado por la derecha del que el oficialismo de valió para impulsar su agenda represiva no cambia los hechos ni la percepción popular de los mismos: las y los trabajadores seguimos sin poder acceder a derechos elementales como la salud, la educación, las pensiones, la vivienda. Y ello es una olla a presión que pretenden contener con medidas represivas, reformas al sistema electoral y político entre otros parches a un régimen impugnado por quienes se sacan la mierda trabajando y sólo acumulan deudas.

 

Y entonces…¿a quiénes votamos las y los trabajadores?

Este es el cuadro en que el pueblo chileno es convocado -mediante la amenaza de multas- a votar. Oficialistas y opositores, en muchos casos disfrazados de independientes, invaden medios, redes sociales y espacios públicos con promesas que nadie da crédito. Los esfuerzos que desde el oficialismo se hicieron para ir en pactos de unidad lo pondrían en mejores condiciones frente a la oposición derechista fragmentada en al menos 5 espacios. Sin embargo la decepción de miles ante un gobierno de las “grandes reformas a favor del pueblo” que no sólo no llevó a cabo ninguna, sino que se demostró tan corrupta y represora como la derecha, puede volver inocua la táctica electoral. La ultraderecha pretende canalizar el descontento con ambos sectores.

Desde la izquierda por fuera del esquema oficialista se levantó el pacto “Izquierda ecologista Popular” donde se nuclean ex comunes, Partido Igualdad, Humanista, PC-AP que se presenta con un programa reformista del estado capitalista y con referencias internacionales en figuras como Lula, Maduro y los Kirchner…el plato recalentado y devaluado del frente popular.

Como Fuerza 18 de Octubre no tenemos una política abstencionista en el plano electoral ya que lo consideramos uno más donde dar la batalla por la construcción de una alternativa independiente y revolucionaria por lo que llamamos a votar a las y los candidatos revolucionarios del PTR en la región de Antofagasta. Con el desafío por delante de poner en pie un frente de organizaciones de izquierda, independiente de los partidos patronales, desde y para nuestra clase que, con un programa revolucionario, de cara a los guardianes de éste sistema de hambre y explotación.

25/10/24