El voto obligatorio con inscripción automática debuta en elecciones municipales y regionales -anteriormente operó en las elecciones de los procesos constituyentes- lo que se tradujo en una participación de prácticamente el 85% del padrón, ésto es, más de 13 millones de personas concurrieron a sufragar. Los resultados reflejan un avance de la derecha nucleada en Chile Vamos, que recupera terreno luego del castigo electoral que sufrieron en el 2021, es decir, post rebelión popular. La ultraderecha representada por el Partido Republicano de Kast tuvo un desempeño por debajo de sus objetivos y pierde la preponderancia alcanzada en la elección del segundo proceso constituyente, aunque pasa a gobernar comunas y a tener una mayor representatividad en concejos deliberantes.
Con la obligatoriedad del voto el malestar de miles se expresó a través del voto nulo y blanco: en la categoría gobernador regional ambos alcanzaron el 17,75%, en consejeros regionales suman 25,78%; en alcalde disminuye pero hablamos de un considerable 10,72%; y en concejales entre nulos y blancos se llega a un 21,46%. Estamos hablando de porcentajes altos y por lo tanto representan una alarma para el parchado sistema político.
La derrota que el gobierno quiere matizar
Tras dos jornadas de votación, en la noche del domingo el Presidente Gabriel Boric se refirió a los resultados declarando que “nadie puede atribuirse triunfos arrolladores” lo que evidencia que desde La Moneda se esperaba una derrota aún peor de la acontecida. Presentar los resultados como un virtual empate es un despropósito cuando el oficialismo perdió decenas de alcaldías, cientos de concejalías y peligran las gobernaciones de varias regiones que se definirán en segunda vuelta el próximo 24 de noviembre, incluída la RM. Entre las comunas perdidas en manos de la derecha está Santiago por un amplio margen donde el ex paco y ministro de defensa durante el gobierno de Piñera, Mario Desbordes (RN), le gana a la actual alcaldesa Irací Hassler (PC) que iba por la reelección por 51% a 28%. Una batalla central donde el gobierno sale derrotado pues se trata de la capital del país y la tercera comuna en número de habitantes. Pero también pierde en la simbólica comuna de Ñuñoa y en otras importantes de la RM como Independencia y San Miguel y en total la coalición oficialista pierde el gobierno 40 comunas y casi 400 concejales y ello no se compensa con el contundente triunfo del alcalde de Maipú, Tomás Vodanovich, reelegido por amplio margen.
El oficialismo tuvo un cónclave del gabinete ampliado para hacer el control de daños respecto de los resultados electorales y la crisis política abierta por el caso Monsalve que se profundiza en la medida que se conocen la verdad sobre los hechos y queda en evidencia que, al menos, la ministra Tohá disponía de más antecedentes del caso con anterioridad a los que reconoció públicamente por lo que está directamente implicada en las maniobras de encubrimiento. Hoy se discute su salida del gabinete frente a la magnitud del escándalo pero lo que está claro es que el oficialismo pierde una de sus cartas presidenciales.
La derecha queda mejor posicionada para la carrera presidencial
Así las cosas la derecha tradicional se queda al mando de 122 comunas, la coalición de gobierno con 111 y los independientes -ligados a uno u otro bando patronal pero que fueron por fuera de sus estructuras partidarias- con 103. Republicanos que, como lo señalamos, tenía la expectativa de ser la expresión política elegida por los decepcionados de Chile Vamos y el oficialismo queda lejos de éste objetivo, consagra a 8 alcaldes -de las 59 candidaturas presentadas- en su apuesta fuerte para las concejalías queda con un 13,81 % detrás de Renovación Nacional que alcanza el 15,51% y en el total de Chile Vamos tenemos un 28, 16%. Por último, en cuanto a gobernadores compitió en 14 regiones y solo 2 de sus candidatos lograron pasar a segunda vuelta.
Con éstos resultados, se resuelve a favor de Chile Vamos la disputa por la hegemonía de la derecha que se propuso desde el sector liderado por José Antonio Kast y consecuencia de ello es el anuncio realizado el mismo domingo sobre el apoyo a las candidaturas de Chile Vamos a gobernadores regionales que pasaron a segunda vuelta que compiten con candidaturas oficialistas. Otra de las consecuencias de éstos resultados es que la eventual candidatura presidencial de Kast queda en entredicho y sale fortalecida la de Evelyn Matthei que hasta el momento viene liderando las encuestas.
¿Y a la izquierda del gobierno?
Por la “Izquierda Ecologista Popular” -que nucleó al Partidos Humanista, Popular, Igualdad, PC-AP- ingresaron 17 concejales y el por el espacio “Pacto Ecologistas, Animalistas e Independientes” por el cual presentaron candidaturas el MST en Paine e Independencia (que no ingresaron), resultaron electos 16 concejales. Desde la IEP se explicita en su presentación que pretenden representar una alternativa para los sectores de izquierda decepcionados con el gobierno a partir de un programa de corte netamente reformista y, por lo tanto, una construcción más que con una retórica izquierdista finalmente confiesa que no va a sacar los pies del régimen de explotación capitalista.
El Partido de Trabajadores Revolucionarios -PTR- se presentó con candidaturas a alcaldes y concejales en Antofagasta donde tenía el desafío de defender su banca y finalmente no logró los votos suficientes para retenerla.
En los medios de comunicación se presentó como una de las sorpresas de la elección el triunfo de Matías Toledo que lo consagró como alcalde de la populosa comuna de Puente Alto, arrebatándole a Renovación Nacional que la gobernaba desde hace 25 años. El flamante alcalde puentealtino es ubicado como un dirigente social y político a la izquierda de la coalición de gobierno, de la “izquierda radical” según los medios. Lo cierto es que crece como dirigente comunal al alero de la Coordinadora Shishigang dedicada al trabajo social y relacionada con artistas urbanos que colaboran para asistir a la juventud más vulnerable de Puente Alto. Sin embargo, con la noticia de su triunfo fue convocado por Boric a La Moneda y el momento fue congelado en una foto juntos, un gesto de enorme significancia política que además desde el oficialismo necesitaban frente a una elección con resultados adversos. En adelante veremos si la foto es una anécdota o el comienzo de una alianza con el gobierno de Boric.
Las elecciones pasan, nuestras demandas persisten
Con el calendario electoral inaugurado en adelante, oficialismo y oposición están lanzados a la carrera por La Moneda. Mientras que el show electorero de los partidos se desarrolla, las mayorías populares seguimos privadas de los derechos fundamentales. La experiencia recorrida hasta aquí da cuenta que la solución a nuestras demandas sólo vendrá de la fuerza política que levantemos las y los trabajadores para conquistar los derechos sistemáticamente negados por todos los sectores que vendrán a renovar sus promesas mentirosas. En octubre del 2019 como pueblo trabajador logramos poner en jaque a todo el sistema capitalista, ése es el camino. No podemos seguir esperando algo de quienes no quieren soltar nada, a confiar en nuestras fuerza y nuestra historia de lucha para construir nuestras herramientas políticas y sindicales para avanzar en conquistar el derecho a la vivienda, a la salud, a la educación, a salarios y pensiones suficientes para vivir sin necesidades.
03-11-24